¿Qué sigue? ¡¡¡Aguas!!!

Unión de Morelos
4 de noviembre 10
Javier Jaramillo Frikas
Prohibido Prohibir

Caramba, hecha añicos la capacidad de asombro, siguen encimándose un evento sobre otro dejando a todos estupefactos. En buen castellano: está grueso. Los señalamientos de un capo del narcotráfico en contra del ex secretario de Seguridad Pública del Estado, Luis Angel Cabeza de Vaca, ratifica lo que con admirable oportunidad redactó el colega y amigo Jesús Castillo García en su columna de este diario hace tres semanas: estaría en graves aprietos. Solo uno de estos dos destinos tiene el ex jefe policiaco: acogerse a la figura de testigo protegido con la salvedad que tendrían que valorarlo en la PGR—SIEDO si reúne los requisitos –información valiosa, precisa-- o prepararse para estar otra larga temporada en prisión.

Porque una cosa era que lo aprehendieran quedando la duda si la debía o no, y otra (aun viniendo de un presunto capo) que ofrezcan detalles de citas entre los jefes y el secretario. Si es testigo protegido, cuidado con algunos funcionarios actuales y salidos no hace mucho, que tuvieron que ver en adquisiciones y, quizá, en la recepción de bolsas de origen dudoso. Todos saben que esa es una especialidad de Javier López Sánchez, el antiguo súper secretario, amigo cercano de Cabeza de Vaca, incluso este era recibido por Chabelo en acuerdos privados. Hoy, en el Congreso con un cargo de bajo perfil, López pretende apoderarse del Congreso y quienes lo integran.


Es evidente que la filtración de la averiguación previa de la SIEDO ahora (cuando insistimos que Chucho Castillo lo publicó en lo que es ya, sin duda, la información periodística más relevante de los últimos meses) lleva un fin mayor al que se conozca la relación cabeza de Vaca—Cartel de los Beltrán. Es claro que surge de alguna instancia cercana al mismo presidente, por lo que se da en la pelea por la dirigencia del PAN y la sucesión del 2012. Los panistas han dado por llamar “Fuego Amigo”. Cuestión de entender que el poder del PAN es compartido entre tres grupos: el del presidente, el de los grupos tradicionales al interior del país y la ultraderecha, léase El Yunque. Como que se va entendiendo.


Sin embargo, lo de Cabeza de vaca encuadra en una acción delictiva, pero en estos días que la política no se perdió sino se ausentó desde el máximo poder, el asunto es terminar con el de enfrente así sea de la familia y vivan en la misma casa. Qué respeto ni qué ética. Al abordaje. Ahora bien, tampoco se entendería que la PGR contando con esa información, arreglara la declaración ministerial y solo colocaran lo que les conviene, para cuidar a un político, sea secretario federal o gobernador.

“Fuego Amigo” o lo que quieran, la noticia por más que los ejemplares se esfumaron como por arte de magia, los suscriptores se encargaron de avisar a los demás.


A propósito, ¿quién lo dijo…?

“Ante todo esto nos preguntamos: ¿qué pasa en Morelos? ¿Es éste el lenguaje de la democracia y de la justicia social? ¿Qué oscuros intereses se intentan proteger para llegar al extremo de defender lo indefendible? ¿Qué necedad o complicidad existe entre el gobernador y su partido político, para estar dispuestos en tiempos de debacle electoral y desintegración sistemática a pagar tan alto precio político?

¿Dónde dejan, quienes así actúan, el bienestar y la tranquilidad del Estado y de sus habitantes? ¿Qué buscan, acaso crear condiciones artificiales, para dar paso a una decisión central autoritaria, que en forma golpista pretenda resolver lo que las instituciones democráticas pueden hacer en uso de sus facultades? ¿Qué esperan? Que nos enteremos por los medios de comunicación de un acuerdo popular, operado al más alto y puro estilo antidemocrático.


No, señores diputados, Morelos tiene dignidad y exige respeto a sus instituciones. Al final del siglo una responsabilidad tiene, desde mi punto de vista, el Poder Legislativo, reflexionar seria y profundamente sobre el uso del poder. Estamos en el ocaso de un siglo marcado como siglo de la mega muerte, como consecuencia de un alto costo en vidas humanas y en derechos conculcados, por aquellos que en nombre del poder han infringido contra la sociedad en distintas latitudes, graves y serios perjuicios y éste es el caso de Morelos, donde la omisión y la ineptitud han lacerado a los ciudadanos morelenses.


El Partido Acción Nacional sostiene y actúa, en consecuencia, que en la transición política de México, es indispensable un Poder Legislativo independiente, vigoroso y fiel a su función primigenia de vigilar y acotar el uso del poder.

Por lo mismo, repudiamos estos graves acontecimientos y externamos nuestra más amplia solidaridad con el Congreso del Estado de Morelos.


Exigimos, a nombre de Acción Nacional, la renuncia de Jorge Carrillo Olea a la gubernatura, pues es inadmisible que sigan dándose ejercicios tan pedestres en el gobierno que encabeza”.


(¿Y qué creen? Estas palabras de pronunciaron en la cámara de diputados federal un mes y dos semanas antes que Jorge Carrillo renunciara el 18 de mayo de 1998. Este fragmento de discurso fue pronunciado en San Lázaro en enero del mismo año. Claro, lo dijo un diputado y, más claro, era del PAN.)

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